La Felicidad!… 😊

Si la encontramos en el dinero, ¿Por qué el multimillonario norteamericano Goulo al morir dijo: “Soy el hombre más miserable de la tierra”?. Si la buscaremos en el placer, ¿Por qué Lord Byron, quien vivió una vida de placeres y comodidad escribió: “El gusano, el cáncer y la pena son solo míos”?. Si fuéramos felices con todo el poder militar que pudiéramos controlar. ¿Por qué Alejandro el grande cuando conquistó al mundo entonces conocido, lloró frustrado porque no había más mundos que conquistar?. Si los hiciera felices vivir una vida llena de incredulidad, ¿Por qué el notorio incrédulo Voltaire, escribió “Desearía no haber nacido nunca”?. Si felices nos hiciera la posición y la fama, ¿Por qué Lord Baconsfield, quien disfrutó de las dos cosas en muy buena proporción, pero escribió: “La juventud es una equivocación; la adultez es una lucha; y la vejez es una pena”? ¡entonces! ¿Dónde está la felicidad?. Había un hombre de negocios tan preocupado por los problemas de la vida, que había perdido la paz, una noche sintiéndose desalentando y vencido buscó la soledad para recapacitar en su situación, y decidió remar en su lancha a la orilla del mar. Allí en la margen apareció una luz extraña la cual se esfumó al acercarse él a ella. Siguió remando y de trecho en trecho se volvía a ver la luz, siempre un poco más allá, para desaparecer persiguiendo durante mi vida, siempre en busca de la felicidad y la paz, sin alcanzarlas jamás”. Equivocadamente los seres humanos estamos habituados a medir la felicidad en proporción a los bienes materiales que posean, si es cierto que cuanto mayor número de posesiones se tengan, es también mayor la oportunidad que se tiene de satisfacer los deseos materiales; pero también es cierto que hay algunos deseos y necesidades en el corazón del ser humano que no se pueden comprar con todo el dinero del mundo. ¿Por cuánto tiempo puede usted, comprar la salud?. ¿Cuánto dinero puede pagar usted, por la felicidad?. ¿Tiene suficiente para comprar una amistad verdadera?. ¿Cuánto por no tener problemas?. Hace algún tiempo, triste y solitario se despidió de este mundo el millonario Howard Hughes, atendido únicamente por unos pocos. Murió como había vivido, como un misántropo que no quiere ver ni ser visto, y al morir, muchos ambiciosos alegaron ser herederos. Dando así origen a conflictos y contiendas. Después murió otro “pobre” ricachon, según su propio testimonio nunca fue feliz. Construyó en un acantilado de Malibú, California, un museo de artes en el cual según sus últimas palabras, deseaba ser sepultado al morir. Pero resulta que las leyes de California prohibieron tal entierro, de modo que aquel hombre ni siquiera ese deseo pudo cumplir a pesar de sus millones. Pobre Paúl Getty.

Pues si aún las cosas de esta vida no se pueden conseguir con el dinero. ¡Cuánto menos la salvación!. Y Jesús lo dijo: “La vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee”, palabras parecidas dijo también el Apóstol Pedro “El don de Dios no se compra con dinero”. (Por: Pr. Fernando Henríquez) #ParaReflexionar #LaFelicidadNoSePuedeComprar #LaVidaEsHoy #SeFeliz #DecideteASerFeliz #SoloDiosNosDaLaFelicidad #SoloDiosNosDaLaPlenitudYLaPaz 👍💓🙏✌💖😄